Que sepa el mundo entero que Dios nació









"La nochebuena se viene,
la nochebuena se va,
y nosotros nos iremos,
y no volveremos más.
Resuenen con alegría
los cánticos de mi tierra,
y viva el Niño de Dios
que nació en la nochebuena.
(Villancico tradicional)

 Los villancicos tienen letrillas que viajan por el espacio y el tiempo, desde el siglo XIV. Pero será el siglo XIX cuando el pueblo llano los utiliza con más frecuencia para alegrarse por el nacimiento del Niño Jesús. Y así le cantan a María, a José, a los pastores, a los Reyes, mezclando en sus versos las andanzas de la vida cotidiana que se apresta para esta fiesta entrañable.

 Sin querer, el corazón y la cabeza se van estos días al portal de Belén. Una vez allí, me encuentro como en el cielo, pues decía santa Catalina de Siena que no tiene  puertas. 

 Así entra el que quiere.

 (Tratado del Purgatorio, 14)







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