Caminos de paz



Al repasar las noticias de los periódicos, se encuentran especialmente diferencias en su colocación en las páginas. Serios o sensacionalistas, usan el mismo material de las agencias noticiosas. Lo demás, palabra más palabra menos, es igual. Al  comprobar este hecho, se siente como si una corriente de frío polar penetrara el corazón al ver unas noticias ignoradas y otras sublimadas sin más razón de ser que el querer de quienes dirigen esos apartados de orden.

Al papa Francisco, acaba de visitar Irak, tierra legendaria de donde procede nuestro padre en la fe, Abraham. Nunca antes nadie había visitado esta tierra y a los católicos en ella instalados. Han sufrido horrores de todas clases; se les ha castigado por su fe, y han debido emigrar a otras regiones sin pertenencia alguna.

Por supuesto, muchos periódicos han citado la visita, pero de paso, sin entrar en el significado para la convivencia humana de esta visita por un Papa, que, cojeando, con 84 años de edad, no repara en medios para decirles que la paz es posible entre las diferentes religiones, y que la guerra no conduce a parte alguna excepto a la destrucción.

Sin embargo, todos hablan y escarban alrededor de la noticia surgida de la entrevista Oprah Winfrey con Meghan Markle y el príncipe Harry donde la ahora duquesa de Sussex acusa a la Casa Real de Inglaterra,  sin especificar nombres, de racismo contra ella y su hijo Archie.

La reina Isabel atraviesa una vez más momentos difíciles, sin duda. Su marido Felipe, duque de Edimburgo, de 99 años,  lleva internado casi un mes con un padecimiento cardiaco. El heredero, príncipe Carlos,  nunca ha salido bien de los líos de infidelidad con la su ahora esposa, duquesa de Cornualles, mientras estuvo casado con la princesa Diane.

Romper con el pasado es un primer paso, pero no basta. Hay que saber a dónde se quiere ir, cuando se heredan 45 millones de euros, sin un trabajo específico, viviendo en una país ajeno, sujeto siempre a los vaivenes de los media, es difícil moverse sin hacer "poses", con la sinceridad exigida en cada momento. Especialmente, si se han roto los lazos con las respectivas familias, cuando se les paga por "mal" de alguien, aunque ese alguien sea de la propia sangre.

El Papa pide a los iraquíes que regresen a su país y que luchen por conseguir una paz estable, sin violencia. Volver a las raíces es una ayuda, recorrer el camino de la fe andado por Abraham en su interior, sin desplazamientos físicos cuando son innecesarios. Solo la fe nos muestra el camino, a veces, sin salir siquiera de una habitación. 

Mejor que atacar, los media podrían esmerarse más en mostrar en el mundo caminos de paz

Comentarios

Entradas populares de este blog

Cuando se acerca la muerte, y se piensa en el Purgatorio

La noche de las Perseidas, y san Lorenzo de Azoz

A veces se nos olvida que lo santos vivieron ---y viven--- en la tierra