¿De verdad queremos ser más libres?



Mariano Artigas.



El concepto de "libertad" viene de muy lejos, mucho más de la Revolución Francesa, de donde tomó gran auge. 

Debemos releer a Juan en sus escritos evangélicos. En medio de una discusión con los judíos, les revela que su "palabra" es la ",verdad" y la verdad os hará "libres" (8:33). 

Se concatenan en esa cita literaria tres conceptos fundamentales: palabra, verdad, libertad. Sólo quien conoce las cosas como son, puede llamarlas por su nombre. Entonces, sólo el "creador" de las cosas sabe  de ellas sin más. De esta manera nace la "palabra interior" como consecuencia del conocimiento: conoce su nombre, el nombre de las cosas. No se puede nombrar lo desconocido.  La verdad consistiría entonces en conocer en acto  lo que algo es en sí, y por tanto poder llamarlo con su nombre. En primer lugar, se daría un decir silencioso, porque  quien conoce  lo que algo es, experimenta su nombre  en la forma de un verbo interior dicho a sí mismo.  A partir de aquí, se puede hacer explícito ese verbo para los demás por medio de la palabra. En ese momento, se quiere lo conocido, y cesa  la búsqueda intelectual porque, en verdad,  ya se posee la cosa y su verdadero  nombre, y, al conocerla, la libertad elige lo dado como algo suyo porque sabe que es verdad.

La libertad va en busca de la verdad. No se entretiene ---aunque podría distraerse de su fin oliscando otras avenidas--- con cosas vanas. Y cuando descubre por "causalidad" lo que le conviene en verdad, brota el amor desde su interior para abrazar ese encuentro, porque se da cuenta de que así es más libre en su interior, aunque dese fuera apenas se note el cambio.

Así es nuestro camino. Conocer y encontrarse con la palabra nacida de ese encuentro con la cosa, y de la alegría experimentada nace el elocuente ánimo para  decírselo a los demás.

La libertad no es un capricho; es el encuentro trabajoso con la cosa para la cual hemos venido a este mundo. En el otro, hay paz, pues ya se ha obtenido lo que con tanto trabajo se buscaba en la tierra.

Mariano Artigas, que fue profesor de la Universidad de Navarra,  sostiene que hombre es "aquel que busca la verdad".






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