¿Se calla el Papa de lo que viene para evitar malévolas noticias?

 No es fácil guardar silencio. A pesar de la insistente demanda de información sobre los próximos eventos en el Vaticano y la situación en Nicaragua, Francisco no suelta palabra.

Va a celebrarse un consistorio especial en unos días con la presencia de todos los cardenales del mundo. Se habla de la reciente reforma de la Curia como uno de los temas a tratar; pero ese asunto ya está zanjado. También se habla de la posible dimisión de Francisco, después de  su visita a l´Aquila, tumba del papa Celedonio, primer papa en dejar el pontificado en pleno ejercicio de sus funciones, y lugar de visita del papa Benedicto XVI antes de su renuncia al papado hace 13 años, segundo en tomar tal decisión. Tampoco Francisco había dicho nada sobre la situación en Nicaragua, donde se persigue a la Iglesia católica y a sus representantes, si bien hoy lunes, ya han aparecido algunas notas en los periódicos donde el papa Francisco se pronuncia sobre la situación de este país centroamericano pidiendo un diálogo abierto y sincero.

A sabiendas del alboroto de los media ante la más insignificante de las noticias salida de un resquicio vaticano, quizá resulte prudente guardar silencio antes de la presentación  del asunto ante quienes va destinado. 

Los asuntos pendientes, esperados en los círculos católicos, se esperan con avidez debido a la cantidad de noticias que el Papa suele comentar con los periodistas, sin que nadie se lo pida por ejemplo, durante sus viajes. Es decir, el papa Francisco habla cuando quiere, no cuando se lo demandan el mundo interesado de los ambientes vaticanos.

En fin, se trata de esperar una semana más para san er por qué el Papa ha convocado al Colegio cardenalicio a nivel mundial, para tratar de asuntos supuestamente resueltos y de su posible renuncia  después de visitar la tumba del papa Celedonio después de nueve años de pontificado sin haberse arrimado a este lugar.