No puede vivir con gusto quien tiene mala intención

La vida es un gran regalo y de este hecho sólo deberían nacer buenas intenciones y deseos, pues la ira de hermanos, ira de diablos. Es decir, haz el bien y no mires a quién. Y los hombres todos lo somos, de hecho, hermanos. vale la pena el dicho "haz vivo lo que quieras haber hecho cuando mueras". Lo cierto es que por cosas de la vida, la conducta humana, bien por pensamiento, palabra obra u omisión, se aparta de su creador, y, por consiguiente, de sus hermanos los hombres, a quienes empieza a ver con recelo o envidia. Al actuar así, no puede vivir tranquilo pues la sospecha empieza a gravitar en su alma. Esquiva a quien le parece molesto por alguna razón, y empieza a vivir su vida a su aire, despreocupándose de su "próximo". Es muestra clara la muerte de Abel a manos de su hermano Caín, como ocurre después de esta primera pareja de hermanos a lo largo de la historia. Recelos, envidias, acaban manchando la convivencia entre quienes poseían el mundo entero. Y ...