La memoria
Creo que en los tiempos de Platón no existía el alzhéimer . De lo contrario, Platón nunca hubiera cifrado en la memoria toda su esperanza. Conocer era volver a recordar aquello que un día, venido de las ideas, se grabó en la memoria. Educar, por tanto, era ejercitar la memoria, algo que algunos maestros y alumnos han descuidado hoy. La palabra escrita suponía para Platón un recurso mecánico suicida en contra de la memoria. Al recurrir al texto, la memoria no se ejercitaba en recordar. Pero, si todo lo sabido del mundo se encerrara en una memoria, su deterioro supondría el fin del conocimiento. Algo estremecedor. No andaba lejos Platón de la actualidad. Un gran ordenador lo es en función de una supermemoria. Todo queda ahí almacenado. Los estudiantes de hoy apenas memorizan porque todo está por ahí, guardado en la memoria de alguna computadora. Consecuentemente, cuando la computadora falla, se viene abajo el sistema digital y lo que en ...